junio 19, 2011

De Sisak al Parque Natural Lonjsko Polje


Sisak- Lonjsko Polje: 67.4 km

Cada dia en la carretera trae cosas inesperadas. Según mis predicciones ya estaría en Serbia hace varios días pero varios afortunados atrasos me han retenido en Croacia.
Pasé un par de días recorriendo Sisak y sus alrededores y más tarde, avanzando siempre hacia el este, me interné en el parque natural de Lonjsko Polje (la j pronunciada como i) cuyas antiguas casas de madera han sido declaradas por la Unesco patrimonio de la humanidad. Me demoré varias horas al pasar por un puente-presa en el que paré a descansar y observar la construcción cuando salió el encargado y me miró con curiosidad. Después de decirle con alguna dificultad quien era yo y hacia donde iba, me invitó a pasar a la oficina y platicamos (en algo parecido al croata y mucha mímica) cerca de tres horas, luego, aprovechando su estufa, me preparé algo de comer y al poco tiempo nos despedimos. Al caer la noche me encontré en un pueblo llamado Krapje, bordeado por el rio Sava  y rodeado de campos de cultivo, sin mucho lugar para acampar. Haciendo uso de mi rustico croata comencé a preguntar a la gente donde podría poner mi casa de campaña para pasar la noche. Al cabo de una hora sin mucho éxito me crucé con una mujer de edad mediana paseando con su hija por la calle desierta y enterándome de que hablaba inglés me presenté, le dije a donde me dirigía y le pregunté por un lugar (tal vez un patio) donde acampar. Su casa estaba a menos de 10 metros y si, tenía un jardín. Después de pensarlo un poco dijo-  Pero hay una habitación libre, no tiene sentido que te quedes afuera- Dormí como un tronco.
Por la mañana platicamos, me contó que vive en Bruselas y que en un par de años podrá dejar la vida de ciudad y finalmente volver a Croacia para criar a su hija en la relajada vida del campo. Al poco tiempo llegó una pareja de amigos suyos y escuché otras historias: Como se prepara el Slivovitca, licor casero de ciruela típico de la región; que él fue capitán de una división en la guerra Serbo-Croata; que le gusta la historia y que ha leído sobre Pancho Villa. Al partir me fui contento (y tarde). Gracias por su hospitalidad Yélica(no pude encontrar en signo adecuado para escribir el nombre) y Angelica!